Imatge: RC Celta
El Celta de Vigo llega a tierras gerundenses con el objetivo de alzar el vuelo con dirección a las competiciones continentales. Después de varios años en que las últimas jornadas estuvieron marcadas por la consecución de la salvación, los celestes pueden dejar amarrada la permanencia con varias jornadas de margen. Esta realidad ha hecho despertar al celtismo, muy unido tras la llegada de Claudio Giráldez hace un año, la ilusión por volver a vivir grandes noches europeas.
A Madroa ilumina al celtismo
Este curso, el equipo, comandado por Aspas y Claudio, están firmando una campaña para el recuerdo. El anhelo de un equipo con una identidad muy marcada donde la cantera cuenta con un papel sustancial que por fin se ha visto reflejado en el campo. Ese ideal, sumado a la comunión perfecta con la afición, que está batiendo récords de asistencia a los partidos en casa, está llevando en volandas al equipo.
En cuanto a aspectos del juego, el cuadro vigués se caracteriza por su esquema táctico, 3-4-3 donde los dos interiores juegan como carrileros, la defensa adelantada y la construcción del juego desde atrás. Sus principales armas son Marcos Alonso y Starfelt en defensa, Fran Beltrán e Ilaix Moriba en el centro del campo, y Iago Aspas y Pablo Durán en la delantera.
Un equipo frágil a domicilio
Sus números este curso permiten sacar varias conclusiones. La diferencia con los puntos obtenidos en Vigo (26) y fuera de casa (6) denota un poderío total en Balaídos y bastantes flaquezas a domicilio. Los 36 goles anotados y los 38 encajados confirman esa propuesta arriesgada del entrenador porriñés, que buscan hacer daño desde el balón, pero expone demasiado la espalda de la zaga hacia posibles contraataques.
De cara a la cita en Montilivi, Giráldez tendrá a toda la plantilla a su disposición para afrontar un partido muy importante de cara a ese soñador regreso a Europa.
Posible alineación
Guaita; Javi Rodríguez, Starfelt, Marcos Alonso; Sergio Carreira, Fran Beltrán, Ilaix, Mingueza; Iago Aspas, Borja Iglesias y Pablo Durán